Algunos seguros de coche a todo riesgo no cubren el granizo que tan habitual es hoy en día

Estamos acostumbrados a que el granizo acabe con las cosechas, ya que algunas de ellas están protegidas con lonas y otros elementos textiles que no tienen demasiada resistencia. Sin embargo, cabe esperar que la chapa de un coche sí aguante este fenómeno meteorológico. Por desgracia, algunos coches se ven gravemente afectados.

Cada vez hay más granizadas en toda España. El cambio climático deriva en que este tipo de situaciones aumenten su frecuencia, lo cual acaban pagando caro algunos conductores. Sin embargo, otros tan solo se ven obligados a abonar la franquicia del seguro o ni siquiera eso, ya que su seguro se encarga de absolutamente todo.

Eso sí, debes tener en cuenta que existen importantes diferencias entre unas aseguradoras y otras. En este sentido, es fundamental hacer uso del comparador de seguros de coche conocido como CHECK24, puesto que no solo te ofrece información como la que mencionaremos a continuación.

Sino que además, cuando te has decidido por un seguro u otro, te permite contratarlo online a diferencia de otros comparadores que solo te muestran el precio y la contratación es offline.

En definitiva, si el granizo es un fenómeno meteorológico que te preocupa porque dejas el coche aparcado en una zona exterior, haz una comparación de los seguros de coche. De esta manera, en poco tiempo darás con los productos de aseguradoras que realmente lo cubren.

Tal vez creas que cualquier seguro a todo riesgo lo hace. Es comprensible, puesto que el propio nombre del producto indica que el cien por cien de riesgos están cubiertos, pero nada más lejos de la realidad. Hay excepciones a valorar.

Una de ellas es la de los animales cinegéticos. El más extendido sin ninguna duda es el jabalí, el cual lleva décadas sembrando el caos en las carreteras españolas. Si te cruzas con uno de ellos, tu coche sufre daños y lo tienes a todo riesgo, tal vez el seguro no lo cubra si no hay una cláusula específica que así lo indique. Algo similar sucede con el granizo.

En plena era digital, el marketing es más importante que nunca. Las compañías aseguradoras lo saben, así que no dudan en afirmar que absolutamente todos los riesgos están cubiertos, incluido el granizo. La sorpresa desagradable se produce cuando tienen lugar los daños y el seguro se desentiende. ¿Por qué lo hace?

Algunos seguros a todo riesgo no cubren el granizo, ya que de ello se encarga el Consorcio… ¡pero tampoco paga este tipo de reparaciones!

El pasado verano hubo granizadas realmente graves en zonas como Cataluña, causando una de ellas un fatal desenlace con una niña involucrada. Recientemente, la DANA ha causado estragos en una parte de España. ¿El resultado? En ninguno de los dos casos el Consorcio de Seguros declaró la zona catastrófica.

Si dicha entidad no determina que se ha producido una catástrofe, para lo cual debe haber vientos que superen una mínima cifra de kilómetros por hora y unas precipitaciones que casi nunca se alcanzan, el Consorcio de Seguros se desentiende por completo.

Así pues, toca recurrir al seguro de coche contratado que, como hemos dicho antes, da un ‘no’ como respuesta. ¿Cómo es posible si el producto contratado era a todo riesgo? Desafortunadamente, algunos de ellos no incluyen los fenómenos de tipo meteorológico.

Las reclamaciones nunca llegan a buen puerto, ya que la compañía aseguradora simplemente hará alusión a las condiciones contractuales que fueron firmadas en su momento y que especifican claramente que el daño por el granizo no está cubierto.

Lee bien el contrato para cerciorarte de que hay una cláusula específica

Con tal de evitar una situación tan desagradable como la que acabamos de describir, es de vital importancia leer de arriba abajo el contrato antes de firmarlo. Si la aseguradora no indica expresamente que los daños meteorológicos como el pedrizo están incluidos, opta por otro producto distinto.

Tal vez creas que las probabilidades son ínfimas, pero las condiciones climatológicas cada vez son más adversas e impredecibles por culpa del calentamiento global. Así pues, si por mala suerte acabas teniendo el coche aparcado fuera o circulando cuando cae un fuerte granizo, lo pagarás caro.

No es posible dar una cifra exacta porque cada reparación es distinta. Por ejemplo, en la granizada de Tarragona que hemos mencionado en anteriores líneas, la cual tuvo lugar en zonas como Perelló-Mar, en agosto de 2022 llegaron a caer unas bolas de hielo que eran del tamaño de pelotas de golf. En este tipo de casos, los varilleros han de realizar una labor muy precisa y duradera, lo cual acaba traduciéndose en una factura de dos mil euros o incluso más.

Incluso si las bolas son pequeñas, lo más probable es que la chapa acabe repleta de abolladuras, así que en ningún caso el precio a pagar será barato. Es por este motivo que conviene tomarse el tiempo necesario antes de contratar un seguro para optar por un producto que sí incluya este fenómeno meteorológico.

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